El cáncer de pulmón es el tumor más frecuente en el mundo, siendo además la primera causa de muerte por cáncer. Sólo en España se diagnostican cada año alrededor de 25.000 casos de cáncer de pulmón (afecta a 12 de cada 100.000 españoles), lo que representa el 12% de todos los cánceres y el 20% de las muertes asociadas a esta patología en nuestro país.
Aunque la supervivencia se ha incrementado en un 23’5%, se trata de uno de los cánceres con menor índice de recuperación, en parte debido a que únicamente el 16% de los casos de cáncer de pulmón se detectan en fases tempranas. Por tanto, uno de los aspectos en los que se debe de mejorar en el futuro es en la detección precoz de la enfermedad, lo que aumentaría notablemente la tasa de supervivencia en este tumor.
Para determinar si uno sufre cáncer de pulmón es necesario acudir a un especialista ante cualquier mínima sospecha. Por ello es importante dar visibilidad a la enfermedad y concienciar sobre sus signos de alerta y, aunque la mayoría de los casos de cáncer de pulmón no causa ningún síntoma hasta que se ha propagado demasiado, algunas personas sí que desarrollan algunos en etapas tempranas. Estos son los síntomas más comunes que advierte la Asociación Española contra el Cáncer (AECC):
- Tos persistente: es el síntoma más frecuente y es la manera que tiene nuestro cuerpo de reaccionar ante la irritación bronquial. La tos permanente es el síntoma de casi todos los tipo de cáncer de pulmón.
- Expectoración sanguinolenta: con frecuencia la tos puede ir acompañada de sangre o flema de color óxido.
- Falta de aire o disnea: La falta de aire y dificultad para respirar puede ser una muestra de problemas respiratorios e impide cada vez más realizar cualquier esfuerzo sencillo como subir escaleras o levantarse de la cama. Es frecuente en los tumores localizados en la zona central de los pulmones.
- Dolor en los huesos: si se ha extendido a otras partes del cuerpo pueden aparecen molestias en huesos y articulaciones. La espalda y caderas son las zonas donde se notan más molestias.
- Dolor torácico: se produce cuando el tumor afecta a la pared torácica o la pleura y es característico de los tumores situados en la zona más periférica de los pulmones. El dolor suele empeorar cuando se respira profundamente, tose o se ríe.
- Ronquera: si la voz ronca persiste más de tres semanas se debe ir al médico, ya que el cáncer puede irritar las cuerdas vocales y hacer que la voz sea ronca. Además, también puede aparecer disfonía si el tumor se extiende al mediastino y afecta al nervio que mueve las cuerdas vocales.
- Pérdida de peso y apetito: si se produce una perdida repentina de peso sin ninguna razón aparente podría ser un síntoma de cáncer de pulmón o algún otro tipo de cáncer. Además, puede disminuir el apetito.
- Dificultad para tragar o disfagia: el paciente tiene la sensación de que la comida se le queda retenida en mitad del torax y se produce cuando el tumor o los ganglios afectados ejercen presión sobre el esófago.
- Síndrome de Horner: se caracteriza por la caída del párpado, pupila contraída y transpiración reducida o ausente en la mitad de la cara correspondiente al pulmón donde se localiza el tumor. Este síndrome puede producirse en cánceres que afectan a la parte superior de los pulmones.
Estos algunos de los síntomas más comunes del cáncer de pulmón. Ante cualquier sospecha es importante acudir al especialista, que valorará si los síntomas de un paciente se deben a un cáncer o a cualquier otro motivo, ya que algunos de los síntomas pueden estar asociados a otras enfermedades.
Desde la Asociación Española de Afectados de Cáncer de Pulmón prestamos apoyo a pacientes con cáncer de pulmón y sus familiares. Puedes contactar con nosotros a través de nuestro formulario de contacto o en el teléfono 608 717 552 (horario de atención: lunes, miércoles y viernes de 17:00 a 20:00hs).